Gracias a la visita que realizaron funcionarios del Invima el pasado jueves a la ciudad, microempresarios de Popayán despejaron dudas sobre la normatividad que exige esta entidad para el control y vigilancia de la calidad y la seguridad de los productos farmaceúticos y alimenticios.

Según Zandra Hurtado de la Oficina Asesora de Planeación, “ahora los microempresarios ya no ven al Invima como una entidad que cierra los establecimientos comerciales, sino como aquella que los orienta, asesora y guia de la mano con la administración municipal”.

El próximo paso será la socialización del decreto y la evaluación de las microempresas para solicitar la visita oficial del Invima en cada uno de los negocios.

Liliana Chala, quien trabaja en un proyecto pedagógico social y productivo de procesamientos cárnicos, agradeció el apoyo que brinda el municipio a los microempresarios porque los acerca a los entes que controlan los procesos de calidad y adquieren cada vez más conocimientos.

Manifestó que el acompañamiento de la Alcaldía ha sido indispensable en el crecimiento de sus empresas con convenios y capacitaciones. “La administración de esta forma llega a pequeños microempresarios, quienes reúnen gente para generar empleo”.